12 Septiembre 2011Leganés
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Coloco la piedra sobre el horizonte encendido del parque empresarial Leganés Tecnológico. Las grúas descansan, pero la tecnología no, la tecnología despierta. ¿El qué? La tecnología oculta nuestra falta de razón (y de corazón), de fe en el hombre, de comunicación entre almas. Palabras para la polémica, a ver si alguien despierta, o me hace a mí despertar. Qué más da, son sólo ganas de hablar. Pero a esta hora mejor dejaros con otras palabras, con otro canto. Palabra de Valente. El cuerpo:
El cuerpo del amor se vuelve transparente, usado como fuera por las manos. Tiene capas de tiempo y húmedos, demorados depósitos de luz. Su espejo es la memoria donde ardía. Venir a ti, cuerpo, mi cuerpo, donde mi cuerpo está dormido en todas tus salivas. En esta noche, cuerpo, iluminada hacia el centro de ti, no busca el alba, no amanece el cantor.
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José Angel Valente. No amanece el cantor.Tusquets Editores. Barcelona. 1992
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