Friday, 10 December 2021

EL SILENCIO DICE LO QUE PIENSA A QUIEN PERMANECE CALLADO (aforística del mutismo)





******

Ser uno mismo es callar por encima de todo.
 Y hacer lo que dicta tu silencio.

*

El silencio guarda la paz de los hombres
 que piensan en ser ellos mismos. 

*
No hay paz en la misión de ser uno mismo.

*

Tu silencio está conectado a millones de silencios.

*
El silencio es un imposible sonoro.

*
El silencio grita, habla, musita, canta.


***

Que el silencio guarde la ropa sucia en el viento y la centrifugue en el vasto cielo. Que el silencio desnude los corazones de los hombres que conocen el infierno. Que el silencio deshaga los remordimientos o los encarnice en versos que escupan su veneno.

*

Todos sabemos que el silencio siempre ha sido de pocas palabras, que es un tipo duro con buen corazón que no deja de escribir sobre sus debilidades. De hecho, el silencio es quien espolea a la escritura, es el silencio quien guarda la contraseña de la comunicación.

*

Tarea de un día de octubre: Pensar en otros silencios, en aquellos que me hablan de todo el universo y de todo lo que se acaba. 

****

El silencio abarca todas las lenguas.

*
El silencio es una boca cerrada que se abre hacia dentro.

*

Pienso en el silencio, o ¿es él quien me piensa?

*
Greguería: Trampantojo del lenguaje con lupa y silenciador.

*
En el bozal duerme el perro que ladró anoche.

*
Las mascarillas son las persianas de la boca. 
Las celdas, las camisas de fuerza de los labios.

*

El silencio es el universo en pausa.

*

El silencio fija el reglamento de la música.

*

El silencio nunca dirá lo que piensa de sí mismo.

*

Lo que pienso es sólo un ruido del silencio.

*

El silencio es el velo ardiendo de la divinidad.


*****

 Mundos de silencio donde los colegas aún ríen borrachos, mundos de silencio donde las mujeres que tuve duermen agotadas y apacibles como la lluvia callada de otros mundos imposibles que estuvieron en mis manos.

*

El silencio dice lo que piensa. Desde su dulce asfixia coge una cuerda con un nudo corredizo, la pasa al otro lado de la viga del corral y espera a que tomes posiciones. Ahora dile en silencio adiós a tus zapatos, y a tus pies que rompan la silla y salgan volando.


******

El silencio siempre tiene la escopeta cargada.

*

Un salvaje con lanza, un francotirador escondido.

*

Un viejo con garrota, un cuervo muerto.

*

 Tu siguiente error de cálculo y de palabra
guarda la verdad.

*

 El silencio adora la música porque
 la música es la vestimenta del alma.

*

 El silencio aborrece a los relojes. Devastan su imperio.

*

El silencio tiene su propio reloj sincronizado con la nada.

*
La nada siempre tiene escusas para romper el silencio.

*

¿Y si el silencio tuviera su propia biografía?

*

Biografía del silencio: la historia de un dolor sin moral.
.
*

El silencio puede doler tanto como la palabra.

******

El silencio, ese bellaco.

*

El silencio, ese balazo.

*

El silencio, ese sabio.

*
El silencio, ese todo.

*

El silencio siempre ha dado clases de elocuencia.

*

Manejar el silencio es un ejercicio digno de los faquires y
la prueba de iniciación de los tragadores de fuego. 

*
Sería bueno que toda persona asistiera a clases de silencio, o a obligarlos incluso, como el ir a la mili.

*

 No hay arma más destructiva que el silencio. Y pienso en la memoria. E incluso la memoria necesita del silencio.

*

El silencio transforma la memoria en olvido. 

*
La historia del silencio se resume en un suspiro.

*

No creas que el silencio es sinónimo de paz. 
Las grandes traiciones de la historia se forjaron en silencio.

No creas que el silencio es sinónimo de felicidad.
La mayoría de las enfermedades se producen por guardar demasiado silencio.

 

No creas que hay poderes que superen al silencio. El poder del bien y el poder del mal.

 

No creas que Dios es silencio, aunque sea cierto.


*
No creas que el silencio tiene porqué estar callado.

*
El silencio y dios tienen firmado un contrato de confidencialidad.

*
Cada vez que la cosa se pone chunga el silencio tira de dios.

*
Cada vez que miras a tu pasado el silencio ...

*

El silencio es una montaña, 
y la montaña  un silencio de tierra.

*

El silencio es una atrocidad para la máquina.

*

El sigilo de los valientes cruza el desierto.

*
La palabra, arma de fuego, pierde ante el silencio, arma de camuflaje. Porque la palabra al igual que la munición se agotan mientras que el silencio es eterno.

*
La eternidad se mide en la longitud del silencio. 


*
El silencio es lo eterno. Y hoy no me interesa.

*

El silencio es la lengua de los muertos.

*

El silencio se agolpa en la garganta,
y canta en bajo la bóveda de los ojos.

*

Quien diga algo sobre el silencio romperá la piel del aire.

*

La piel del aire espera la esponja del viento.

*
El silencio tiene la piel de las nubes.

*
La vibración del silencio hace sonar a la orquesta del cielo.

*
El silencio maniata versos en la luz.

*
Si al silencio le ayudas con los ojos cerrados verás más claramente.

*

Del silencio proceden las voces de mis iguales.

*

La palabra y el silencio forman el matrimonio feliz
de todos los tiempos.
 
*
Si uno fuera otro rompería todo silencio.

*
Mi interés por el silencio crece en silencio.

*
La verdad y el silencio son amantes a ojos de todos.

*
El silencio me ha dicho que deje de tocarle los bemoles.

*
Las despedidas dejan signos de puntuación.

*
El silencio se escribe con puntos suspensivos.

*
El silencio es un puntazo entre dos conversaciones.

*
No hablar de alguien es otra manera de silenciarle.

*
Los silencios que no elegimos son los más incómodos.

*
El ángel y el silencio no necesitan lubricante.

*
El silencio y la lluvia tienen la bondad del sueño.

*
Todo soñar transcurre en silencio.

*
Cuando el silencio habla de otro silencio.

*
Cuando guardar silencio es salvar la vida.

*
Cuando guardar silencio te condena a muerte.

*
Cuando en silencio te duermes.

*
Cuando el silencio es un juguete.

*
Cuando el silencio te pertenece.

*
Hoy el silencio es un privilegio.

*
Cuando el silencio es un trono de reyes.

*
Cuando el silencio es un sepulcro.

*
Cuando el silencio es una canción de cuna.

*
Cuando el silencio es un ruido constante.

*
Cuando el silencio te mira. 

*
Cuando el silencio te convence.

*
Dicen que el silencio no tiene cura.

*
Dicen que el silencio está preso.

*
Dicen que el silencio tiene garrapatas.

*
Dicen que el silencio es un perro viejo.

*
El silencio es un veneno que cura.

*
El silencio es dios cuando despierta.

*
El silencio está dicho en los que dicen que callan.

*
Me digo en silencio: me hago cierto y real.

*
Me digo en silencio: estate quieto 
y vete a dormir en silencio

*
El silencio vela por ti y te arropa
con su manta cálida y callada.

*
Basta por hoy de silenciar la palabra.

*
La palabra escrita tiene su esqueleto de silencio.




***
**
*
*
*
*

*

*


*
**
*



*

Thursday, 9 December 2021

WALDENINO (homenaje e introducción a Henry David Thoreau)



Waldenino es el diminutivo extremeñizado de Walden, pues es en un rincón de Extremadura -Garciaz- donde he realizado este proyecto -"Andanzas y estancias"-, en alusión directa a la cabaña en la que H. D. Thoreau vivió aislado de la sociedad durante casi ochocientos días. Su propósito de huir del mundo era encontrar la vida en su estado puro y escribir sobre ello. Toda una aventura, un experimiento personal, una investigación antropológica, un estudio de la naturaleza circundante, y, en última instancia, una obra de arte, del arte supremo al que llamamos vivir.


El 9 de agosto de 1854 se publica Walden, o la vida en los  bosques, un ensayo en forma de diario personal en el que  su autor, Henry David Thoreau, narra la experiencia de vivir aislado y a su bola en una cabaña construida con sus propias manos en las inmediaciones del lago Walden Pond (Concord, Massachusetts) durante dos años, dos meses y dos días.

El 9 de agosto de 2021, tras varios días visitando una abandonada caseta de pastores y explorando su entorno, yo, Román García Palacios, acudo con una cuartilla, copiada a mano con lápiz, para leer unas líneas de la celebre obra de Thoreau al atardecer, en el interior de la exigua y maltrecha construcción de pizarra.

También hago fotografías de otros ángulos e inspecciono con detenimiento y delirio la ubicación y el interior cuadrangular de la ruina, como si fuera un lugar santo y contuviera el espíritu de aquel ilustre norteamericano que sentó las bases de la desobediencia civil.


He querido hacer con la lectura de un breve pasaje de Walden un sencillo homenaje. Qué menos que honrar en soledad a viva voz a uno de los maestros y defensores de la soledad. Asceta, pensador, político, activista, científico, economista, ensayista y poeta. Los terrores de la sociedad industrial estaban ya por entonces enseñando sin pudor sus garras y aniquilando bestialmente los reductos la vida auténtica de los seres humanos.

La vida y obra de Thoreau se centró en desafiar los zarpazos de una hidra que hoy sigue fustigando al noventa por ciento de la población mundial. El capitalismo empezó a repartir calderilla y hostias como panes, que no venían del cielo precisamente si no de la esclavitud, que aún en día abolida toma nuevas formas en múltiples campos de producción. 

No sé cómo fue, ni yo ni nadie vivo en la actualidad. Tendemos a deformar la realidad y no digamos la realidad pasada, es decir, la historia. La historia ha dicho que no le importan las personas y menos aún los historiadores, por eso se les ignora y se vuelven majaretas. 

El caso viene a ser así, un relato que ha ido ganando coherencia según ha ido reproduciéndose como un mantra: el capitalismo es un monstruo bueno que mantiene el orden de los privilegiados y que con el tiempo ha ido dotándose de herramientas, teorías y artimañas para perpetuar dicho orden. Ale, vaya usted con Dios, pero con el dios de las monedas. 

Aquello no era nada con el mal que nos azota hoy en día. Aquella sociedad estaba transformándose con la lógica de la burguesía y de sus teóricos de profesiones liberales que justificaban el abuso y la explotación en aras del progreso. El mercado conoció una época de crecimiento desquiciado por los extraordinarios beneficios que el colonialismo suministraba a las grandes potencias.

Había fuerza militar, medios y argumentos locuaces para comerse al mundo que se dejaba comer. El hombre era un lobo para el hombre (Hobbes) y la riqueza de la naciones (Adam Smith) dependía de la voracidad y la falta de escrúpulos para extraer cada vez más beneficios. Nada nuevo bajo el sol, amigo. Todo vale para vender, hasta el robar, si lo que es robado lleva el sello de la Commonwealth, la Casa Real, la Casablanca o de cualquier administración impuesta por una soberanía nacional, o por la soberbia de la Ley.





Y es que la vida sencilla sólo seduce a los sabios, por lo que todo es un complot contra la sabiduría, por eso siempre te quieren vender algo, aunque no lo necesites. La estupidez se erige en el trono del mundo imponiendo con despotismo su ávida lógica de sandeces y necedades, y desde allí, desde la cumbre de la ruindad más rancia y superflua, no para de escupir a todo lo que huela a conocimiento, criterio, libre albedrío, argumentación fundamentada o disertación filosófica. Eso explica la estupidez del mundo y la mía propia.

Amigo, hermano: despide al Saber y Bienestar con cada compra que hagas. Porque comprar es fácil y no sale a cuenta. Huye de lo fácil como de la peste y admite sin reservas que tu sociedad está enferma, que tú estás enfermo, que tu amigo, que tu hermano, que tu dentista está enfermo. Los luddistas ya lo sabían, y mucho antes los estoicos, y mucho después, hace ya cuatro décadas, Félix Rodriguez de la Fuente nos lo recordaba, junto al valor de preservar la naturaleza como principio de la humanidad. Ni puto caso, y así nos vemos ahora, con el agua al cuello negando el hundimiento anunciado del barco en el que vamos. 

No necesitas nada para ser aquel que eres. Todo sobra. Menos la conciencia del yo y su relación con el entorno, porque ahí no cabe el egoísmo. El desnudo es la esencia, por eso es la diana del cazador moralista, aquel que se oculta tras la opulencia y la abundancia, ignorando que está cubierto por una montaña de excrementos.

Y que por eso mismo no pasa nada. Enferma la moral, enfermo el pensamiento, enfermo cada paso que me conduce a continuar con esta farsa infinita de enfermedades y de enfermos poliédricos en enfermerías multifórmicas y nuevos síndromes que la ciencia enferma nombra.

 





El caso es que en Walden encontramos un conjunto de vertientes, tanto filosóficas, como políticas, naturalistas y poéticas de una pujanza actual brutal. Puede impresionar la rabia con la que el pasado se apodera del presente, pero si la actualidad duerme la pesadilla de la tecnificación del mundo, no es de extrañar que nos asalten, pues la vida es un invento constante que necesita el material orgánico del pensamiento y las raíces del cromosoma buscan siempre la paz y la conexión con la naturaleza. 

Su interés por la naturaleza de su entorno es un glosario fabuloso de poesía, además de un estudio de la fauna y la flora que rodean los bosque del lago Walden.  No escapan de su interés los fenómenos atmosféricos e hidrológicos del lago. Thoreau se centra en la observación, pero no sólo es un ser contemplativo. Anota todo. Se niega a cazar animales salvajes, se convierte en vegetariano y abstemio. Tampoco fuma, ni toma café o té. 




Simplificar la vida al máximo puede parecernos radical; y qué, a veces es lo que necesitamos. Thoreau era, y es, un revolucionario de los pies a la cabeza, por algo Gandhi le tenía en un altar -decía que De la desobediencia civil era su Biblia. T. Kacznsky se considera un devoto suyo, seguidor de la vida en los bosques que Thoreau defendía frente al avance deshumanizador de la industrialización. Hoy en día, frente a la digitalización del hombre, se hubiera puesto a apedrear a toda máquina con teclado, incluida ésta desde donde escribo, con un montón de pedradas en la cabeza y un túmulo de corredor en el corazón.
 




Monday, 30 August 2021

EL GRAN SILBADOR (otra fábula de una piedra dada)






El Gran Silbador fue extraído de una orilla rocosa justo al lado del yacimiento de La Illeta, en el término municipal de El Campello.

Desde allí silbaba a toda sirena -y sireno que pasaba, (es la versión más arcaica del chulopiscina, piropeador y vacilón) cotorreaba mediante soplidos y graznidos guturales con los cetáceos y ahuyentaba a los desperdicios plásticos con  fuertes bufidos. Por las noches, cuando la luna completaba su circunferencia de luz, se le oía interpretar el Epitafio de Saikilos, y la pequeña bahía recogía su melodía en el silencio más rotundo de la madrugada para lanzar cada nota a la inmensidad del mar.

El Gran Silbador llevaba allí milenios, muy probablemente, hasta que acudí a su llamada. Dice que ya es hora de contar su historia, de cómo llegó hasta allí desde el extremo oriental del Mediterráneo y de cómo pasó antes por otros enclaves donde el hombre encontró fortuna y acomodo. El Gran Silbador es más del Mediterráneo que Serrat, que María del Mar Bonet, que Kavafis, que Robert Graves.

El Gran Silbador me cuenta también que conoció a Homero mientras, por entonces el joven griego, lloraba desconsolado en las proximidades de lo que después sería el puerto del Pireo. Desde entonces Homero lo portó en una saca de cuero a modo de amuleto hasta el final de sus días. La razón la conocí horas después cuando se animó en su charla al ver la buena compañía, oler el arroz a banda y sentir el frescor de las cervezas  heladas.

Lo que realmente hacía el Gran Silbador no era silbar, como se supone, sino susurrar historias. El primero que las transcribió fue Homero y después Ovidio, a quién fue a parar la piedra silbante. No recuerda bien a otros  que tal vez atendieran al nombre de Hesíodo, Temístocles, Plinio, Aristófanes o Plutarco

A todos ellos les contó azañas y desvelos de marinos y comerciantes, de príncipes, aristois y guerreros, de esclavos, plebeyos y artesanos, de hetairas, ninfas y efebos. Historias de habitantes de otros lugares, de remotas islas, de lejanos pueblos, de extrañas costumbres, de fantásticos seres sin otro contexto que el mar, la costa, la playa, la tierra y el puerto.

A todos dio el mismo nombre: Odiseo; más tarde, a otro Héctor, porque fue perdiendo la memoria de sus nombres y la mitología de por entonces aceptaba de buen grado  la extensión de su folletín con la aparición de los heróes. Y vinieron después otros como Jasón, Teseo, Hércules o Perseo para animar al hombre a encumbrarse sobre los dioses y superarse en valor y astucia, y enseñar con sus aventuras los confines de lo humano y lo divino.

En nuestros días, después de más de dos milenios y medio, le llamamos Ulises y le tomamos como una especie de superhéroe marginal y olvidado porque la Marvel no está detrás y no tiene sobre él los derechos reservados. Y no lo voy a decir más claro ni más alto.

Quién me iba a decir a mí que tras el baño del mediodía, después de la visita al yacimiento de La Illeta,  iba a caer en mis manos el alef de la literatura universal por el hecho -o el gesto acostumbrado ya- de coger una piedra para tan sólo mirarla. Alfonso y Raquel lo saben bien, que buena cuenta hicimos los cuatro del arroz a banda, las ensaladas, las patatas al alioli, las cervezas, los licores y las secuelas de los calores a orillas del Mediterráneo.



 

Tuesday, 17 August 2021

SALIR A FLOTE V (De la extrema humanidad del monstruo y sus festejos)

 


 

"Es falso decir: Yo pienso; deberíamos decir: alguien me piensa"

A. Rimbaud

 

1.

Aquí os espero amigos del alma. Hoy han venido King Kong y Frankenstein con cajas de cerveza para una boda y alguna botella de whisky y de pacharán. Gorzilla ha traído sin alcohol, por la medicación. A Tod Browning le tengo en la cocina con sus asados freaks,  Quiasimodo está de pinche a su órdenes, aunque el chef principal sea Hannibal Lecter. Creo que con ellos el éxito del ágape queda garantizado. 

Joker está de mayordomo, encantado de la vida. El Hombre Invisible queda al cargo del cateringAl Chupacabras le he puesto en el guardarropa, y las labores de jardinería han sido encomendadas a Eduardo Manostijeras , cualquiera le dice que no. Cthulhu queda encargado con los cuidados de la piscina. Las  Banshees serán las madrinas de todo lo que compete a  la iluminación y proyección de imágenes. Nosferatu está contratado como masajista, por si llega alguno con demasiadas tensiones o alguna contractura. A Bitelchus le tengo en tareas de mantenimiento y a Freddy Kruegrer de DJ. Y yo pongo la mansión que la familia Adams me dejó en herencia.

No tengo ninguna duda: todo el vecindario acudirá a la fiesta. Quedan excluidos cualquier  clase de superhéroe. Todos tenemos prejuicios. Detesto a los fantoches. La única excepción ha sido Hulk y The Thing, por aquello de tener algún segurata. No tengo todas conmigo, alguno se puede poner tontorrón y el gran Gatsby, o sea, mi persona, merece la excelencia en celebraciones de este tipo.

P.D.: La lista de ilustres invitados incluye a: Peter Stumpp, Vlad III de Valaquia, James Kelly, Jarabo, Las hermanas Izquierdo, Juan Carlos I, Thug Behram, Gilles de Rais, H. D. Landru, Harold Shipman, Manuel Delgado Villegas, Ed Gein Luis Alfredo Garavito y Karina.

 

2.

 ¿Y si cada monstruo mencionado fuera el símbolo de un error personal, la personificación -o monstrualización- de un arrepentimiento, la alegoría de un fallo cometido? 

 ¿Y si la razón de organizar tan singular fiesta fuera la de perdonarme, la de hacer las paces conmigo mismo? ¿No sería una manera de redimir sentimientos de culpabilidad que sólo conducen a la perpetuación de un victimismo autodestructivo que a su vez conlleva una vulnerabilidad que te expone a un sinfín de sencillas manipulaciones?

 ¿Y si fuera la representación teatral que reconcilia mis fantasmas tras los cortinajes del tiempo y  las dobleces de la personalidad devolviéndoles  a su anterior forma, con su integridad intacta?

 

3.

Esa es realmente la interpretación simbólica de La Fiesta de los Horrores, que vendría a ser, en versión light La Fiesta de los Errores,  en la cual se produce la aceptación del propio monstruo y del terror se pasaría poco a poco a la comedia, recurso que pudiera vencer al miedo de reconocernos tal cual somos y vencer así con ello inseguridades, barreras personales y tontos complejos.

Del monstruo y su conversión en ángel, -que también tenían lo suyo, eran a menudo crueles-, hay algo que no encaja. Quizás porque sigo pensando que según las circunstancias y las presiones a las que el mundo y la vida nos somete podemos pasar de ser uno u otro. De ahí los numerosos entuertos en los que nos vemos envueltos, las contradicciones que nos atenazan, los descalabros que sufrimos. 

Tal vez la memoria de tanto errar y su toma de conciencia pueda llevarnos a una  conciliación real, y entonces celebrar por todo lo alto los fastos del amor propio en aras del amor al mundo. De momento he alquilado, para la próxima fiesta, una mansión a un tal Normal Bates.

 

4. 

Somos humanos cuando asumimos al monstruo, porque sólo cuando lo asumimos seremos conscientes de nosotros, podremos guiarlo, comandarlo, educarlo, y hasta acariciarlo y abrazarlo sin rencor. Somos humanos cuando perdonamos a los otros, porque sólo así nos perdonaremos a nosotros y podremos volver a vernos sin culpa y en calma, en el espejo de la vida que proyecta la luz hacia los adentros por todas las grietas y las heridas que acumulamos. Benditas sean.

 

5.

Alguien me dice al oído: "Paparruchas". Al instante, me muero de risa, y le pregunto, quién eres. No contesta. Entonces está claro: ya tenemos al invitado de honor para la próxima celebración. Gracias tú!!!

 




Monday, 16 August 2021

Wednesday, 4 August 2021

SALIR A FLOTE III (revisión periódica de autoayuda abierta a sugerencias )




I

No es que el mundo haya decidido ir contra la tierra, pero si los que quieren cuidar del mundo no se centran en la tierra, mal vamos. En mi caso quiero cuidar del mundo y por lo tanto centrarme en la tierra. Y compruebo que mis pretensiones globales son demasiado ambiciosas cuando no consigo ni cuidar de mi mismo ni centrarme en mi persona.

Antes de arreglar el mundo procuraré tomarme un tiempo de revisión y arreglos,  que no sean apaños para tirar unos meses o años con la manta de otros en la cabeza. Y pienso que para eso están las vacaciones, para dormir al raso e interrogar al firmamento sobre quién soy, qué hago aquí, qué quiero hacer. 

Pregunto estrella por estrella si me conocen, si conocen a aquel que buscaba piedras sin un propósito en concreto, quizás para configurar nuevas constelaciones, nuevos magnetismos, nuevos campos de energía, nuevos seres protectores, nuevas máscaras que indiquen las nuevas rutas del presente y nos recuerden las viejas verdades de siempre.






II

Antes de centrarme en el mundo, debo encontrarlo, hallándome en el camino que sólo tengo como mío. Recopilo. Antes habré de cuidarme, y no por egoísmo, si no por resposabilidad. Tengo que reparar el avión de cabo a rabo, desde la cabina del piloto al extremo de las alas, desde la cola al tren de aterrizaje, pasando por el fuselaje. Algunas piezas se han desgastado tanto que sencillamente hay que cambiarlas, buscar repuesto, si es necesario en el extranjero. 

Tengo que repensarme, y buscar lo que necesito o no necesito, pues casi siempre sobran piezas en el equipaje, con el consecuente  gasto de energía que implica. Los libros y manuales de autoayuda utilizan la metáfora de "la mochila" que llevamos y de todos los pesos innecesarios que portamos y dificultan nuestro andar. Quién me diría que a estas alturas volvería a la introspección básica y simplona. Vivir para ver, y es que todos necesitamos una revisión periódica, un chequeo, un análisis de la sangre que se cuela en el sistema nervioso.

Lo que decía: antes de todo debo hacer el diagnóstico de los errores, de los fallos, de las piezas que fallan, de las averías que sufro. Y por supuesto, conocer los límites del avión que piloto, que ya tiene una edad. Sin el  conocimiento e implantación de los límites el cacharro pronto se iría al traste de nuevo. Ah, y fundamental, el radar. Sin radar no pienso ponerme en órbita, que ya perdí la cuenta de las veces que me estrellé y cada descalabro deja la marca de una cicatriz, y aunque cada cicatriz tiene un halo heroico de torero, de malote, de guerrero  curtido en mil batallas, no quita para que cada roto costurón  nos deje algo de amputación visceral -y social, que todo hay que decirlo, y mucho en cuanto a deformidades, traspiés habituales y andares renqueantes.  

Con tantas medidas tendré que sacar libreta y tomar tantas notas y apuntes como sea necesario. De lo contrario no levanto el vuelo ni de coña.  Que la prudencia nos acompañe, amigos. El tiempo de la temeridad terminó. Ahora hay que cambiar el motor a corazón abierto y echarle todo el coraje del mundo para afrontar ese cambio interno sin necesidad de cambiar de nombre, de ciudad o de casa. 

La nave saldrá a flote, de eso estoy seguro, pero mientras tanto quieto el corcho, en puerto o en el hangar, en el parking o en el corral, que tareas tengo, y no pocas, aunque estemos de vacaciones y andemos aún sin reloj.




Sunday, 1 August 2021

SALIR A FLOTE II




 
1.

Flotan las hojas secas en el agua, flotan los insectos muertos y las ramas caídas, flotan los astronautas y la chatarra espacial en el repleto vacío del universo. Flotan los cadáveres de los amantes vencidos por el amor y flotan las ropas del ayer en las aguas renovadas del presente, sacudidas por la marea en una playa rocosa y desierta.

*

Ofelia, desde su acuoso altar tendida, flota en el cielo de las aguas, en el paraíso perdido del infierno apagado en lágrimas. Mientras, no queda otra, espero a la Dama del Lago en sempiterno suspiro, espero sin esperanza a que me tienda la mano que empuña la espada, a que emerja la fuerza del fondo insondable del amor que se fue. Es sólo una despedida, un hasta luego en la eternidad de las estrellas que se prenden en el corazón.

*

Pero estas leyendas no ayudan ni socorren al abatido fauno que flota apolíneamente en las aguas del ayer, estas leyendas resultan ser perniciosas idealizaciones que vienen a vendar una herida que no cierra en el tiempo porque el tiempo quiere aún la sangre de la leyenda presente, quiere aún, antes de que se pierda en el espacio infinito, centrifugar la memoria para extraer la verdad diamantina.

Al menos, pienso a veces, y a veces sueño en acabar momificado por estos escritos  y así alguien, mis descencientes supongo, mi heredera, conocerán la historia de un Gilgamesh noqueado por el capricho irremediable de amar a quien siempre amó y poder examinar el pergamino incompleto de esta historia carbonizada. Es como si ese capricho irremediable, que sugiere ser la cárcel de un espejo espectrante, reprodujera los hitos de una historia cuyos protagonistas cambiaron de película a mitad de rodaje.

2.

Toda belleza es el resultado de una cirugía a  corazón abierto, una operación plástica que transforma y depura el alma.  Ya sea en la realidad o en el sueño,  la belleza implanta su semilla y con cuidados y mimos construye jardines colgantes que asoman tras los párpados. 


3.

Del amor o del odio nunca quise hablar. Son generadores de energía que luego nos extienden recibos altísimos que pagar. A no ser que seas del servicio de administración, o hayas metido cabeza en las ruedas giratorias del poder -astral.


4.

El dolor, -dios me salve de su desmesura,  activa en la sensibilidad unos mecanismos de defensa con lanzacohetes y satélites por doquier que tienden a paliar, o al menos contrarrestar, la intensidad de una emoción que desborda a la razón misma.




Sunday, 6 June 2021

SALIR A FLOTE




Son muchos los caminos que conducen a la belleza, pero uno de los más notables es el dolor.
 

Tuesday, 13 April 2021

SPLEEN DE MADRID (paseos vespertinos por el Retiro)



1.

Dar la bienvenida a la estación del florecimiento no es un simple capricho del destino en el devenir feliz de un desocupado, es dar la bienvenida a la luz cuando has estado en las tinieblas más espesas e intuir que con ese gesto te has ganado la salvación en el falso cielo de los felices.

Dar la bienvenida al barroco -que siempre encuentra el desnudo desde lo múltiple y lo abigarrado del corazón; al estremecimiento de las esculturas -que siempre rompen el orden de la materia; al rubor y estiramiento de las aguas -que lamen e hidratan su piel única; dar esa bienvenida digo, no es capricho de un segundo. Es el aleteo primero del ave que abandona el nido y se lanza al mundo.

Cómo no dar la bienvenida al trinar incansable de los pájaros que copulan, al verdor insolente de las plantas que en tu respirar exhalan selváticas fragancias y no dejan señal alguna de amor o gracia. Cómo no traer a tus manos palabras claras y frescos ademanes transmutados en flor.


2.

Por qué no.  Hay que ser agradecidos, educados y galantes con la vida, con la gran señora Maturalesa, pues ella, y sólo ella, hace con esta tierra maltrecha paraísos por doquier.

Nosotros, vivos aún, tenemos la inmensa fortuna de habitar la Tierra, nos brinda placeres que, aunque desapercibidos, podemos degustar sencillamente y a diario. Así que yo, al menos, voy a dar la Bienvenida a la Primavera con este pequeño elogio preñado de esperanza; escrito sobre la quietud del estanque que refleja calma, descanso, reposo y  dulce eternidad tras el arduo invierno.

Qué menos. Ella, la Primavera, se lo merece todo, precisamente porque nos concede la oportunidad de renovarnos. Diría que la Primavera brinda de inmediato el don de nacer, una renovada capacidad de análisis, de interpretación constante del renacer en cada brotadura  arbórea. Es por ello que reclamo, en pos de esta tesis, mi derecho a renovarme, sin dejar de morir.


Monday, 15 February 2021

LA NEVADA DEL SIGLO NO ERA UNA BROMA




Nos reíamos como niños cuando escuchamos las previsiones meteorológicas para la fecha de Reyes ("Será la nevada del siglo"); nos reíamos como niños cuando empezó a nevar y empezó a cuajar y empezó a blanquear un poco, y después un mucho, un todo, y con tanta intensidad que iluminó los rostros de los niños que aún reímos. 

Empezó a nevar y no paró en dos días. Empezaron a cortarse puertos, autopistas, carreteras, caminos, accesos, circunvalaciones. Empezó a paralizarse todo, como si todo se hubiera congelado con tanta nieve, como si todo ese congelamiento hubiera detenido el ritmo cardíaco del mundo. 

Empezó a hacerse el silencio, como si la nieve fuera un aislante sonoro, como si fuera el corchopán de una caja que contiene una de esas bolas de cristal donde siempre nieva.

Empezaron a cerrarse parques, colegios, oficinas, comercios, restaurantes. Incluso se cerraron inteligencias que encontraron refugio en diversas religiones.

Empezaron los árboles a quebrarse, las ramas partidas empezaron a tomar posesión de la vía pública, y empezaron a organizarse y a formar batallones astillados listos para el ataque. Hasta que entraron en razones y eligieron un destino más útil para todos. Se construyeron chozos, de todos los tamaños y formas imaginables, incluso los había que simulaban palacios y pagodas. 

La nevada del siglo, de cuyo nombre no quiero acordarme, vino a ser la nevada del milenio. Hasta ahora. Veremos si lo del cambio climático no nos trae una nevada del siglo cada año. A ver si así nos terminamos de creer que estamos en alerta climática, -además de la alerta vírica de la pandemia. 

¿Nos seguirá dando igual, o nos seguiremos riendo, creyendo que todo es una broma? Catástrofes y risas; nieve, hielo y sol de invierno; ruido, estruendos y silencio, vientos, tormentas y sofoquinas. Lo que está claro es que todo cambia, y que de ahí no salgo ni más digo.





 

FURGÓN DEL FUEGO EXTINTO

    *   cadáver carcasa esqueleto cuerpo calcinado en óxido enmohecido tejido de la ceniza abrigo del fuego consumido.   *   yelmo casaca ...